Sebastián Fernández, “El bosque misterioso”

Estaba un día en el bosque con un amigo casando pájaros cuando de pronto vimos una sombra entre los árboles. Nos quedamos sorprendidos, no sabíamos qué era. Entonces nos fuimos a mi casa y le dijimos a mi mamá pero como de costumbre no nos creyó. Decidimos ir con un par de amigos no creyeron lo que habíamos visto. Cansados, fuimos al bosque nosotros solos y acabamos ahí toda la noche. Ya tarde, amamos una carpa y nos pusimos a dormir. De pronto escuché un ruido que me despertó: era el fantasma. Me asusté y desperté a mi compañero y le dije lo que vi. Desarmados rápidamente la carpa, guardamos todo. Con una linterna alumbrado el camino hasta mi casa. Llegamos y sin hacer ruido después de dos horas y otra vez la sombra y escuché que mi perro lloraba: era el espectro. Grité llamando a mi mamá y el fantasma desapareció. Desde ese día con mi amigo no vamos más a ese bosque.

No hay comentarios:

Publicar un comentario